¿Para qué sirve?
Mantienen la calidad del combustible para evitar que se acumule suciedad en las partes más sensibles del motor, como las válvulas de inyección o los inyectores. A la vez, reducen la emisión de contaminantes.
Consecuencias de un mal funcionamiento
Un aditivo de combustible no Original puede causar daños en el motor y en el catalizador del vehículo, ocasionados por una acumulación de residuos. Esto puede provocar un empeoramiento del comportamiento del vehículo en carretera y un aumento de las emisiones de contaminantes.
¿Cuándo usar los aditivos de combustible?
Se recomienda un uso regular de los aditivos de hasta dos veces al año, en especial antes de iniciar viajes largos.